La crisis económica mundial que vivimos desde el crack de 2008 se ha hecho crónica, el capitalismo está siendo incapaz de lograr una recuperación y un crecimiento sostenido desde entonces, por lo que la guerra ha tenido lugar, como lo explica el marxismo, para continuar la lucha por el control político, económico y de los mercados a un nivel mayor.
La confrontación imperialista tomó primero una forma comercial y actualmente su forma bélica en terreno Ucraniano, con la confrontación de los dos grandes bloques que pelean la hegemonía mundial, China y Rusia por un lado con un número cada vez mayor de países aliados y EEUU y los países de la OTAN, por el otro.
Inflación
En este escenario la dinámica económica se ha hecho aún más caótica y las tendencias nacionalistas y proteccionistas se están agudizando, así como fenómenos como la inflación que ha batido récords. Empezamos el 2023 con tasas elevadas en todo el mundo, México no fue la excepción con una inflación acumulada de 7.8%.
Los efectos en los bolsillos de las y los trabajadores es claro al ir al mercado y encontrar productos 30% más caros. El riesgo de una etapa de estanflación es inminente, pues pese a todas las medidas que se han tomado para rebajar la inflación, no se ha podido escapar a la dinámica internacional.
Entre estas medidas, el aumento del salario mínimo en más de un 20% por tercer año consecutivo no logran revertir la pérdida del poder adquisitivo acumulado, la política del control de precios ha tenido efectos positivos limitados como en el caso del gas bienestar, lo mismo que el Paquete Contra la Inflación y la Carestía (PACIC), el cual se presentó en mayo pasado, y consiste en otorgar a ciertas empresas una licencia única y universal para la importación de alimentos, que al mismo tiempo significó enormes ventajas para las empresas agroalimentarias y un riesgo sanitario para los consumidores.
Las medidas para elevar las tasas de interés al ritmo de EEUU, ha mantenido a flote al peso mexicano, pero no soluciona la inflación y si bien las exportaciones siguen una tendencia ascendente, habrá que esperar los efectos a un plazo más amplio.
El aumento de la tasa de interés si bien puede presionar a la baja a la inflación, la realidad es que también eleva las deudas. Esto es un problema para la economía de la clase trabajadora que ocupa el crédito para compras de productos de la canasta básica. También es un problema encareciendo la deuda externa. Al mismo tiempo los bancos se forran con ganancias que se dispararon 30.9% entre enero y noviembre de 2022[1].
Por el momento los malabares están logrando mantener la inflación a raya, comparado con países como Inglaterra o Alemania que superan el 10% y el 8% respectivamente[2]. Pero en la frágil y dependiente economía mexicana estamos lejos de poder respirar con tranquilidad.
Pese a todo, estabilidad económica
Hay varios factores que permiten mantener una relativa estabilidad económica para México, en primer lugar el vertiginoso aumento de las exportaciones. Según datos del INEGI entre enero y septiembre de 2022, las exportaciones tuvieron un alza anual de 19.7% tan sólo en septiembre el valor de las exportaciones aumentaron 25%, el dato más alto registrado desde 1991 año en que se comenzó el registro.
El principal motor de este histórico aumento es la industria automotriz, esta industria ha capitalizado la nueva dinámica de relocalización llamada “nearshoring”, es decir, acercar los centros de producción al mercado estadounidense. En agosto pasado el aumento representó un 42.5% interanual. México, es un país clave para esta estrategia[3].
El nearshoring ha surgido como una medida intermedia del imperialismo norteamericano para sacar sus empresas e inversiones de China, en medio de la guerra comercial que enfrentan estos dos países, sin meterlas de nuevo a su territorio con el enorme diferencial que implicaría en costo de mano de obra. Si bien, esta medida no puede ser inmediata, ni generalizada y podría resultar incluso más costosa, por el momento está siendo una ruta de escape del imperialismo, para rebajar la dependencia y los costos de producción, pues actualmente México tiene salarios más bajos que China, con todo y los recientes aumentos.
Por su lado la Inversión Extranjera Directa en México (IED) creció en enero de 2022 un 63.7% con relación a cifras preliminares de enero de 2021[4], debido a inversiones extraordinarias, si se eliminan estas, el crecimiento fue de 5.8%, en los primeros tres trimestres del 2022 México captó 29.5% más que en 2021, EEUU representó el 39.1% de estas inversiones.
Sí bien la X Cumbre podría marcar un antes y un después para el nearshoring, el objetivo se ve muy lejos, la sombra de una nueva recesión mundial afectará sin duda el ritmo de las inversiones norteamericanas.
Desde 1965 que México abrió su franja norte para el establecimiento de maquilas, estas han crecido rápidamente, así como se han conformado verdaderos complejos industriales, también se han diversificado y cualificado, por ejemplo, México hoy ocupa el sexto lugar mundial en producción tecnológica del mundo y el tercero en recibir más inversión extranjera directa en tecnología aeroespacial. México ofrece a EEUU salarios bajos, precariedad laboral, disponibilidad de materias primas y una mano de obra cada vez más calificada.
En 2021, EEUU puso más inversión en México que en China. Esto ha repercutido en las cifras de empleo, que siguen creciendo, de hecho en algunas zonas industriales del norte, se habla de una “crisis de mano de obra”, que se agudizó con la pandemia.
Otro efecto del aumento de exportaciones es el llamado “superpeso”. El banco de México ha logrado enganchar las tasas de interés mexicanas a la dinámica de la FED, se ha anticipado a las sorpresas de sus fluctuaciones, sin embargo, lo que más fortalece al peso es la creciente demanda de exportaciones hacia EEUU. México es actualmente el segundo mayor exportador hacia Estados Unidos, después de Canadá y el principal exportador de autos[5].
La X cumbre de norteamérica
La convocatoria a la X Cumbre norteamericana es un paso más en la dirección de blindar a México de la influencia China y anclarnos a los intereses y la lucha imperialista de EEUU por sostener su hegemonía a costa de incrementar la dependencia mutua.
No es casualidad que los acuerdos incluyan el aseguramiento de la cualificación de trabajadores jóvenes mediante el Proyecto de Movilidad Estudiantil de América del Norte para la industria asegurando así la entrada de México y Canadá por primera vez en la historia a la iniciativa “100k Strong”. Otro de los acuerdos fue la captación de México de todos los migrantes irregulares que crucen la frontera con EEUU, para establecerlos en territorio nacional, una mano de obra que está teniendo cada vez más alojamiento en la industria maquiladora y que se convierte en un blanco para la explotación más precaria.
Tampoco es casualidad el acuerdo llamado “Plan Sonora” que implica incrementar el establecimiento de parques industriales automotrices, el incremento de la producción de semiconductores y de baterías de Litio.
Uno de los puntos claves en la guerra interimperialista es el futuro de Taiwán. La provocación de la visita de Pelosi a la isla es una advertencia de EEUU hacia China, frente a lo que el gigante asiatico no se ha quedado de brazos cruzados, sin embargo, la posición que tome el mayor fabricante de semiconductores en el mundo, con una cuota de 63% mundial, es importante. El control de Taiwan es una apuesta muy grande para el imperialismo norteamericano y parece no estar dispuesto a poner todos los huevos en una sola canasta ¿Qué alternativa tiene? México.
Ya uno de los planteamientos de la X Cumbre norteamericana, fue la sustitución del 25% de importaciones “Asiaticas”, entiéndase China; por mercancías producidas en la “región”, entiéndase en EEUU.
Sin embargo, para que México pueda jugar un papel importante en la producción de semiconductores que abastezca el enorme mercado estadounidense, se requiere una transformación e inversión brutal y tiempo. Aun así, parece que lo intentarán, por ello en esta cumbre uno de los acuerdos fue realizar una reunión para el análisis geológico del territorio de los tres países, para valorar las riquezas minerales y verificar el potencial de disponibilidad de materia prima. Una seria amenaza de despojo aún más feroz en México que tiene ya el top de los países con más asesinatos de defensores del territorio.
Pese a todos los planes del imperialismo, aún quedan muchos huecos por resolver para convertir a México en su gran fábrica, por ejemplo, el monstruo incontrolable en el que se ha convertido el narcotráfico, en buena medida gracias al vecino del norte con su creciente demanda, el blanqueo de sus capitales y la dotación de armas al crimen organizado. Ahora llaman al orden y exigen medidas serías para su control, el juicio a García Luna o la aprehensión de Ovidio son más que oportunos en este contexto.
La lucha de clases
El imperialismo tiene un plan para combatir a China y defender su título nobiliario usando a México, pero no tiene todos los elementos bajo su control, especialmente los relacionados a la lucha de las y los trabajadores. La otra cara del desarrollo industrial de las últimas décadas es la creación de una clase obrera joven y poderosa en la frontera norte, en plena pandemia tuvimos una auténtica revuelta sindical en las maquiladoras contra el charrismo, lo que le significó la conquista del SNITIS y la confianza para seguir luchando por contratos laborales dignos, esta batalla tiene mucho combustible, más aún cuando el poder adquisitivo sigue estando muy por debajo de cubrir la canasta básica.
Para continuar con sus planes, el imperialismo tendrá que doblegar a esta clase obrera maquiladora, para asegurarse de mantener costos bajos de mano de obra. Las conquistas de independencia sindical, deben ser sólo el inicio para fortalecer aún más a este sector. Tambien será clave combatir todo tipo de prejuicio nacionalista y sumar a nuestros hermanos migrantes a la lucha por condiciones dignas de trabajo.
Riqueza para unos pocos, miseria y explotación para la mayoría
Se podría creer que pisar el acelerador a la industrialización en México sería positivo, o la creación de un nuevo tren turístico como el mal llamado “Tren Maya” o que conectar el comercio de dos continentes con el transístmico, nos traerá riqueza y desarrollo, sin duda, el avance tecnológico es fundamental para la humanidad, pero dentro del sistema capitalista, esté desarrollo se orienta a mejorar la lógica de la explotación, depredar los recursos del medio ambiente y atraer a las mayores lacras capitalistas como la trata y el tráfico de drogas, mientras el negocio es redondo para unos cuantos, dueños de las grandes empresas multinacionales, concesionarios de las mega infraestructuras y banqueros.
Basta mirar hacia China como ejemplo de un desarrollo industrial sobre la base del trabajo esclavo en pleno siglo XXI.
El panorama económico para México está lejos de ser nítido, pero sin duda, el paso a la ofensiva que ya dio la oligarquía estadounidense para mantener la hegemonía pasará por someter a México a sus necesidades, mantener costos bajos de producción, tomar materias primas y territorio, saqueando y devastando como buen colonizador del siglo XXI, exprimiendo la mano de obra migrante y nativa y necesariamente pasará por el sometimiento del gobierno.
Los discursos moralistas sobre el valor que se debe dar a México y los países latinos, salen sobrando para un imperialismo que no pretende mejorar su ética, sino sus posiciones económicas, tampoco valdrán los “blindajes constitucionales al litio” o las tímidas reformas soberanistas sobre los energéticos así como las apelaciones a respetar a los pueblos indígenas.
Combatir la miseria y la explotación en México se convertirá más que nunca en un combate abierto contra el imperialismo decadente, hoy más que nunca necesitamos organizar una izquierda revolucionaria que junto con nuestros hermanos en Canadá, Estados Unidos y el resto de Latinoamérica combatamos como uno sólo hombre a ambos bandos imperialistas por igual.
[1] https://www.jornada.com.mx/2023/01/24/economia/012n1eco
[2] https://datosmacro.expansion.com/ipc
[3] https://www.eleconomista.com.mx/empresas/Exportaciones-automotrices-mexicanas-rompen-record-en-agosto-20220927-0033.html
[4] https://www.eleconomista.com.mx/empresas/Mexico-aumento-64-sus-llegadas-de-IED-en-el-primer-trimestre-20220524-0040.html
[5] https://elpais.com/mexico/2022-10-27/las-exportaciones-de-mexico-aumentan-un-25-y-alcanzan-un-nuevo-record.html
