Que las cumbres del clima son una mentira hace tiempo que es un secreto a voces. Cita tras cita observamos que los desastres medioambientales se extienden y sus consecuencias para la vida en el planeta se agravan: desde olas de calor con registros de temperatura récord, incluyendo zonas árticas, pasando por inundaciones, sequías históricas o la aceleración del derretimiento de grandes masas de hielo —casi 500 glaciares, según la Unesco, desaparecerán en las próximas tres décadas—, hasta la muerte cada año de siete millones de personas en el mundo por la contaminación del aire.