El pasado martes 21 de octubre más de dos mil profesores del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) tomaron las instalaciones sindicales de la sección 51 en Puebla, para pedir la salida del Sindicato de Cirilo Salas y Elba Esther Gordillo, líderes charros, traidores y corruptos.

Después de la mega marcha histórica del pasado 16 de octubre, donde más de 30 mil maestros se movilizaron hacia las instalaciones sindicales, la sede de la sección 23 fue tomada por miles de maestros y ahora las oficinas de la sección 51 están, también, bajo  su resguardo, pues quieren realizar elecciones para renovar las dirigencias a nivel local y nacional y así luchar por la democratización del Sindicato, para que éste sea transformado en una verdadera herramienta de lucha del magisterio en Puebla y a nivel nacional.

El movimiento que inició con el rechazo a la Alianza Calderón-Gordillo por parte del magisterio en varios estados del país, ahora ha incluido la demanda por la democratización del SNTE. La lucha en Morelos es la más avanzada en este sentido, donde los maestros presionaron a su dirigente para que se pusiera al frente del movimiento y han mantenido un paro de labores desde hace más de dos meses apoyados por padres de familia también.

Pero ahí donde los dirigentes no han querido escuchar la voz de los maestros para defender la educación pública y sus derechos laborales, los trabajadores han optado por echarlos del Sindicato. Éste ha sido el caso de Puebla, donde los dirigentes charros Erick Lara y Cirilo Salas de la sección 23 y 51, respectivamente, demostraron su traición al magisterio al ratificar la Alianza Calderón-Gordillo con el Gober Precioso sin consultar a las bases que los han desconocido y piden su salida del sindicato, así como de la asesina y corrupta Elba Esther Gordillo.

Con las secciones 23 y 51 tomadas por miles de maestros poblanos, están demostrando que no darán un paso atrás en su lucha contra la Alianza Calderón-Gordillo y avanzarán en la democratización del SNTE. Pero esta lucha no será sencilla. Los charros y el gobierno de Calderón siguen firmes en su Alianza y no cederán tan fácilmente. Recientemente, Calderón elogió dicho pacto y aseguró que “servirá para mejorar la enseñanza” (La Jornada, 22/10/08), manifestando así su apoyo a Gordillo, aún cuando miles de maestros están pidiendo su salida.

Por eso la lucha del magisterio tiene que dar un paso más en su lucha. Avanzar de las movilizaciones que ha realizado, y demostrado así su fuerza, a impulsar una huelga general para echar atrás la Alianza que continúa con la privatización de la educación pública. La derrota de la Alianza Calderón-Gordillo pasa por el fortalecimiento del ala de izquierda, la Coordinadora Nacional de Trabajadores del Educación (CNTE), que luche por la dirección legítima y legal, dentro del SNTE; misma que llame a conformar un Frente Único de Lucha con todos los trabajadores explotados y oprimidos de nuestro país (incorporando sus demandas) e impulsar una huelga general de 24 horas para frenar todos los ataques a nuestros derechos y derrocar a Calderón, que como vemos apoya a Gordillo y defiende los intereses de los capitalistas que lo impusieron en el gobierno.
El derrocamiento del gobierno espurio de  Calderón sería el primer paso para frenar los ataques a nuestros niveles de vida. Representaría la posibilidad de elegir un gobierno democrático de los trabajadores de la ciudad y el campo que siente las bases para otro tipo de sociedad, donde nuestro derecho a la educación, trabajo digno, salud, alimentación, etc.,  estén garantizados: una sociedad socialista.

Militante, Puebla
Octubre 23, 2008.

 


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