Una sola lucha contra violencia sionista
¡Paremos el genocidio, paremos todo!
¡Ruptura de relaciones ya con Israel!
El pueblo palestino enfrenta un genocidio brutal. En dos años, más de 60,000 personas han sido asesinadas en Gaza, incluyendo 18,000 niñxs. La población vive hacinada, sin acceso a alimentos, en un territorio devastado por bombardeos constantes. Escuelas, hospitales y viviendas han sido convertidos en ruinas. El gobierno de Netanyahu impulsa una “solución final” al estilo nazi: guetos, campos de concentración y exterminio. Israel ha evidenciado no tener límites con los recientes ataques a la flota global Sumud.
Este crimen no sería posible sin el apoyo del imperialismo norteamericano, hoy encabezado por Trump, ni sin la complicidad de la Unión Europea, que mientras habla de “derechos humanos” sigue vendiendo armas al Estado de Israel. Tampoco sin el silencio y colaboración de regímenes árabes como el egipcio, que reprimen la solidaridad con Palestina.
México también es cómplice. Aunque el gobierno de Claudia Sheinbaum dice reconocer a Palestina, en los hechos mantiene relaciones diplomáticas, comerciales y militares con Israel. Mientras Gaza arde, México firma acuerdos y continúa cooperando con un Estado genocida y no respalda la flotilla ni plantea respuesta ante el ataque que han sufrido dos de ellas en las que viajan connacionales. No hay lugar para discursos vacíos: se necesita una ruptura inmediata.
Además, el vínculo entre México e Israel no es nuevo ni superficial. Israel ha sido proveedor clave de armas, tecnología de espionaje y entrenamiento militar a las Fuerzas Armadas mexicanas. Empresas como Elbit Systems, Verint y NSO Group (creadora de Pegasus) han vendido herramientas que se usan para espiar y reprimir a movimientos sociales, periodistas y defensores de derechos humanos. El caso de Ayotzinapa lo confirma: los propios normalistas y familiares de los 43 han sido vigilados con tecnología israelí.
El sionismo ha sido parte activa de la militarización del Estado mexicano. Exmilitares israelíes han formado cuerpos de élite, entrenando bajo doctrinas de contrainsurgencia. Y mientras tanto, Israel protege a Tomás Zerón, prófugo clave en el caso Ayotzinapa, negando su extradición y convirtiéndose en cómplice directo de la impunidad.
Por eso este 26 de septiembre, a once años de la desaparición de los 43, llamamos al paro estudiantil y a movilizarnos en defensa de Palestina y por justicia para Ayotzinapa. No podemos seguir indiferentes ante el genocidio ni ante la violencia que también se ejerce aquí.
Convocamos a toda la comunidad educativa, a organizaciones estudiantiles y sindicatos combativos a organizar comités por Palestina, realizar asambleas, pegar carteles, volantear y sumar fuerza para una jornada de lucha amplia y combativa.
¡Desde el río hasta el mar, Palestina vencerá!
¡Vivos se los llevaron, vivos los queremos!