Escrito por Luis Alonso La desaparición de Edmundo Reyes Amaya y Gabriel Alberto Cruz Sánchez, ocurrida el 25 de mayo del 2007 ha llevado al EPR a realizar diferentes acciones para exigir su presentación con vida; desde ataques a instalaciones de PEMEX hasta la invitación a un dialogo con el gobierno federal a través de un comunicado el 24 de abril y con la intermediación de intelectuales, sin embargo el conflicto continúa.

El dialogo con Gobernación

A pesar de que el EPR, a propuesta del grupo de intelectuales, aceptó no realizar acciones armadas para que se diera el diálogo, el gobierno federal respondió desconociendo al grupo de intermediación y emplazando al grupo guerrillero a una rendición para que ahora si puedan dialogar. A las autoridades lo último que les interesa es dialogar, y mucho menos les interesa entregar a los desaparecidos o hacer justicia en casos como la represión en Oaxaca o la masacre en Aguas blancas en junio del 95; lo único que les interesa es, por una parte llenarse la boca de palabras como “dialogo”, “debate” “acuerdos”, etcétera, para dar una cara benevolente ante la opinión pública, pero por otra parte lo que les interesa es proteger a sus verdaderos amos, los caciques y capitalistas que controlan los estados de Guerrero, Oaxaca y Chiapas y a sus perros guardianes como Rubén Figueroa (responsable de la masacre de Aguas blancas), Ulises Ruiz y otras escorias más.

La guerrilla no es el camino

El EPR apareció públicamente el 28 de junio de 1996 en el vado de Aguas Blancas, al conmemorarse el primer aniversario de la matanza de 17 campesinos. Desde ese momento a realizado diversos ataques contra el ejercito y atentados a centros comerciales así como a instalaciones petroleras. La realidad es que el capitalismo ha llevado a la miseria a millones de trabajadores del campo y la ciudad, mas aún en Estados como Oaxaca, Chiapas o Guerrero donde la población sufre las peores condiciones de vida, sin salud, ni servicios básicos, sin empleo y sin tierras; esta terrible situación a orillado a una parte de la población a asumir la forma de lucha armada contra el gobierno y los caciques, que concentran las tierras fértiles y posos de agua potable para sus propios intereses. Sin embargo estas acciones, a pesar de que esta lucha es totalmente legítima, sólo han servido para recrudecer la violencia contra los campesinos pobres, por parte de los paramilitares y el ejército regular, ya que esta lucha se da de manera aislada. Algunas acciones del EPR, se han dado en el marco de movilizaciones muy importantes a nivel nacional, el gobierno ha usado las acciones de estos como una manera de confundir al resto de trabajadores, vinculando movilizaciones y violencia y así generar un ambiente de miedo. ¿Cual es la solución? En un comunicado, el EPR afirmaba que la revolución había empezado, es totalmente cierto, pero es un grave error pretender identificar la revolución con la lucha armada de pequeños grupos clandestinos. Los marxistas nos oponemos totalmente al movimiento armado aislado de las masas, lo que se necesita no es la alternativa que ofrece el EPR, sino la organización en conjunta de una huelga general de 24 horas. Es de vital importancia unir en un solo programa revolucionario las luchas de los campesinos pobres con la lucha de los trabajadores ya que el movimiento de los obreros concentrados en la ciudad determinara la victoria. Los asesinatos y las desapariciones no pueden quedar impunes, tenemos que crear comités de autodefensa en el campo y la ciudad que respondan de manera unificada como un solo hombre, ante los intentos represivos del estado. Tenemos que organizar los bloqueos de carreteras y puertos, al mismo tiempo que la huelga general. Solo con la lucha consiente de la clase trabajadora contra la burguesía podremos conseguir la victoria ¡Por la presentación con vida de los desaparecidos! ¡Por la libertad de todos los presos políticos! ¡Ni un paso a tras en la lucha por el socialismo!

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